
No hay porqué examinar si su manuscrito requiere
un prólogo introductor; a mí me es entado caso una necesidad agregar a las
hojas del lobo estepario algunas, en lasque he de procurar estampar mi recuerdo
de tal individuo.
No es gran cosa lloque sé de él, y especialmente
me han quedado desconocidos su pasado y su origen. Pero de su personalidad
conservo una impresión fuerte, y como tengo que confesar, a pesar de todo, un
recuerdo simpático.
El lobo estepario era un hombre de unos cincuenta
años, que hace algunos fue a casa de mi tía buscando una habitación amueblada.
Alquiló el cuarto del doblado y la pequeña alcoba contigua, volvió a los pocos
días con dos baúles y un cajón grande de libros, y habitó en nuestra casa nueve
o diez meses. Vivía muy tranquilamente y para sí, ya no ser por la situación
vecina de nuestros dormitorios, que trajo consigo algún encuentro casual en la
escalera o en el pasillo, no ,hubiésemos acaso llegado a conocernos, pues
sociable no era este hombre, al contrario, era muy insociable, en una medida no
observada por mí en nadie hasta entonces; era realmente, como él se llamaba a
veces, un lobo estepario, un ser extraño, salvaje y sombrío, muy sombrío, de otro
mundo que mi mundo.
Yo no supe, en verdad, hasta que leí éstas sus
anotaciones, en qué profundo aislamiento iba él llevando su vida a causa de su
predisposición y de su sino, y cuán conscientemente reconocía él mismo este
aislamiento como su propia predestinación. Sin embargo, ya en cierto modo.
Lo había conocido yo antes por algún ligero
encuentro y algunas conversaciones, y el retrato que se deducía desusa
anotaciones, era en el fondo coincidente con aquel otro, sin duda algo más
pálido y defectuoso, que yo me había forjado por nuestro conocimiento personal.
Por casualidad estaba yo presente en el momento en que el lobo estepario entró
por vez primera en nuestra casa y alquiló la habitación a mí.
Reseña
Este libro habla como dice la sinopsis de un
hombre que creía en su personalidad doble den hombre-bestia, es un libro que te
hace reflexionar sobre como ver la vida. En mi caso cambio mi forma de ver como
las personas son tan frágiles y a las vezas fuertes aun estado cerca en el
suicidio y la alegría y como estos sentimientos forman parte de uno en su forma
de ser.
Hesse, H.(1927). Lobo Estepario. México, DF: Edit. Edhasa
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